Adán, mi nuevo compañero

Sabía que este día iba a llegar. Yo tengo mucha fe en los concursos y me presento a todos los que veo aunque hasta hoy no había dado sus frutos. Pero mi suerte ha cambiado, este premio es la recompensa a tantos años de esfuerzo incansable ¡¡¡he ganado un Ipaaaaad!!!

El otro día participé en el enésimo concurso de una revista de moda a la que estoy suscrita, promocionaban una tienda de ropa online y para participar sólo había que comprar una prenda en esa tienda (un vestido monísimo, por cierto), darle a "me gusta" y compartirlo 5 veces en Facebook, retwittearlo otras 5 veces y añadirlo a mis círculos de Google+. Ya lo daba por perdido cuando el otro día vi mi nombre entre los ganadores y me llamaron por teléfono. Ya lo tengo en mi poder y todo.

¡Es más monoooo! Lo primero que hice fue meterme en internet y comprarle todos los complementos necesarios: una funda con teclado, otra de piel sin teclado, un par de lápices y una gamucita para limpiarlo. Ah, y le he hecho un bolsito de ganchillo para que vaya más protegido. Estoy tan encantada que duermo con él y todo. Le he instalado por supuesto todas las apps para ser feliz: redes sociales, canales de televisión, revistas de moda, compras online y por supuesto, las apps para encontrar pareja. La ventaja es que ahora las fotos de los chicos disponibles se ven mucho mejor y así no los descarto tan rápido, me quedo un rato mirándoles a los ojos fijamente a ver si tengo alguna conexión especial con alguno y se trata del amor de mi vida. De momento no ha habido suerte. 

Quién sabe, quizás a partir de ahora mi Ipad haga la vez de pareja y deje de buscar porque él, que es muy macho y se llama Adán me escucha, me da respuestas, es viajero, muy inteligente, me hace compañía y me da calorcito. ¡Todo un portento, mi Adán! Sería perfecto si también hiciese de fontanero, electricista y cocinero, pero de momento Apple no ha sacado esa versión. Habrá que esperar, aunque igual les mando un correito por si no lo han pensado...

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